¿Qué es?
Se trata de un juego de exploración sensorial el cual consiste en colocar en una cesta (la cual no tenga ningún elemento peligroso para niños y niñas) materiales naturales de la vida cotidiana y que permitan a nuestras criaturas explorar diferentes texturas, colores, tamaños y formas.
Esta actividad la hemos trabajado durante el curso y los niños y niñas les ha encantado.
Beneficios de la actividad
- Estimulación de los sentidos.
- Permite la exploración autónoma de los objetos de su entorno.
- Despierta en el niño el interés y la curiosidad por el mundo que le rodea.
- Favorece la atención y la concentración.
- Mejora la capacidad motora y manipulativa: coger objetos, solar, golpear, agarrar...
¿Qué materiales podemos meter en la cesta?
Lo primero y más importante: que sean objetos que podemos encontrar en casa y que no contengan piezas pequeñas ni se puedan romper fácilmente por seguridad.
Ejemplos de materiales:
- Madera: cucharas, mortero, ...
- Metal: flanera, colador, cuchara, tapas de botes, ...
- Tela: manoplas, pañuelos, cintas tela ...
Os adjuntamos algunas imágenes de un cesto de tesoro fabricado en casa en estos días, para que tengais algunas ideas si os apetece realizarlo en casa.
Muy importante: todos los materiales han de ser seguros. Las latas que aparecen en las fotos, son seguras y no cortan. Siempre ofrecer estando un adulto cerca: para observar y disfrutar viendo cómo juegan nuestros pequeños y pequeñas.
Nuestra hija tiene su cesto y disfruta muchísimo con los materiales. Gracias por vuestro trabajo! Un abrazo.
ResponderEliminarQué bien que lo aproveche! Seguro que tiene un juego precioso.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar